En respuesta a la demanda de divorcio de Mehri, su marido la roció con acido mientras ella dormia con sus dos hijas pequeñas, ahora ella, que solo ve sombras con el ojo que le queda, sabe por lo que le cuentan que una de las pequeñas, Rana de 3 años, tiene el 60% del cuerpo quemado. Desde entonces viven de hospital en hospital y en su casa en un pequeño pueblo al sur de Iran. La ley "Ojo por Ojo" le permite hacer lo mismo con su marido pero ella en compensación pidió cambiarlo por el divorcio, desde entonces el ha amenazado varias veces su vida. La mayor preocupación de Mehri es la pequeña Rana que intenta seguir viviendo como una niña normal sin entender que paso y que pasará con futuro.
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http://lightbox.time.com/2013/01/24/the-agony-of-injustice-in-iran/#3
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